Cuando un seguidor del movimiento Disciplina Doméstica Cristiana decide golpear a su mujer debe pensar bien qué objeto va a usar: Un cepillo del pelo, por ejemplo, es "excelente para lograr la picadura deseada", pero se puede romper fácilmente.

Otra opción es usar una raqueta de tenis de mesa, que es
silenciosa y estable, pero no puede ’chuzar’ lo suficiente como para
hacer llegar el mensaje.
Estas recomendaciones son algunos de los trucos y consejos detallados
en el ’Paquete para principiantes’ de la disciplina doméstica, un
documento de 54 páginas que establece los principios y prácticas básicos
de la Christian Domestic Discipline (CDD).
Los creadores del peculiar sistema describen el movimiento como la
"práctica entre dos cónyuges en donde la cabeza de familia toma las
medidas necesarias para lograr una relación sana y dinámica, así como
para crear un hogar con un ambiente sano y para proteger a todos los
miembros de la familia de resultados peligrosos o perjudiciales
castigando los comportamientos no deseados para el bien de la familia".
Haciendo una interpretación acomodada de la Biblia, el DDC se
posiciona como un estilo de vida en el que se utilizan azotes y otros
castigos (pérdida de privilegios, tiempos de aislamiento, etc.) para
mantener una casa cristiana en orden, de acuerdo con
christiandomesticdiscipline.com. "El hombre es dominante y la mujer es
sumisa, como se detalla en la Biblia”, explica la página web.

El blog beginningdd.com publica artículos con títulos como "consolando después del castigo",
donde literalmente se dice: "Es importante que el consuelo tenga lugar
después de todos los castigos, no sólo los azotes. Incluso algo tan
simple como un abrazo y un beso una y otra vez en algún rincón, durante
los momentos de dormitorio, unas líneas de escritura, cartas de
disculpa, etc puede ayudar a la pareja para volver a conectar y
fortalecer ese vínculo emocional entre ambos".
*Con información de RT.
http://www.tercerainformacion.es/spip.php?article53884#forum43603